Conferencias, presentaciones de libros y otros
En las escaleras del Palacio de Anaya se encuentran Sempronio y una estudiante que, a punto de enfrentarse a un examen, repasa algunos datos de la historia de Salamanca, mientras que el otro está impaciente por hacer tratos con La Celestina.
En esta ocasión asisto a un recorrido teatralizado que nos acercará al clásico literario de La Celestina. Es un domingo de junio a las 20:00 horas.
Disfrutamos de tres actores estupendos que alternan en los papeles de Sempronio-Calisto-Padre de Melibea (Carlos San Jorge), la estudiante-Lucrecia-Melibea (Elena Davidson) y por último la actriz que hace hablar a la alcahueta (Patricia Sánchez), sin olvidar a las intérpretes de lenguaje de signos, y por último llevan consigo una bicicleta que sirve de perchero para el vestuario de los actores.
La adaptación no escatima ni en rimas ni en ambientación, con una buena dosis de humor y una alcahueta fantástica en su papel, al igual que los otros dos actores. No olvidaron algunas de las más destacadas citas del libro, como “Amor, dulce nombre te dieron pero amargos hechos fueron”. Tampoco faltaron graciosos momentos de interacción con el público, por ejemplo cuando Calisto pide ayuda y pregunta por un piropo para su Melibea.
No trato de hacer crítica cultural o de teatro, sino de contar lo que ocurrió para transmitir un poco del impacto en los que lo vivimos y divulgar este tipo de actividades. Me sorprendió en primer lugar la gran afluencia de público con espectadores jóvenes que no esperaba encontrarme.
La obra va cambiando de escenarios: una parada en un rincón, en la plaza de los leones, en la entrada del huerto de Calisto y Melibea, antes de la escena más dramática en el pozo del mismo, en el patio chico y finalmente en la Cruz de Aníbal. Tras un gesto de los actores se libera una carcajada que se va contagiando a los demás espectadores.
Entre la representación de la historia literaria, introducen pequeños apuntes sobre algunos de los lugares y edificios más emblemáticos del recorrido, lo que enriquece la representación, o la representación enriquece el paseo por la ciudad con otros ojos. Me dejó con muy buena sensación y me regaló una agradable hora y media.
Este tipo de eventos contribuye a romper el muro de los clásicos, de manera que los dibuja más amables, de repente no parecen tan pesados o difíciles o lejanos a los lectores más reticentes, y animan a su lectura, por qué no. Del lado contrario, te permiten ver la ciudad de otra forma, imaginarla en la época donde vivieron esos personajes en su relación con el entorno, y se descubre otra cara de las calles.
Hasta la próxima y asistan a estos eventos siempre que puedan.
4 replies on “La Celestina. Recorrido teatralizado: Salamanca, dulce nombre te dieron”
Muchas gracias, Mar, por dar difusión a nuestro trabajo, que por supuesto no sería posible sin el apoyo de Turismo de Salamanca y su excelente programa de Plazas y Patios donde se engloba esta ruta teatralizada. Un gran abrazo. (La Alcahueta jejeje)
Es un placer hablar de un trabajo bien hecho. Felicidades por el espectáculo.
Y por supuesto, que Turismo de Salamanca continúe dando forma a su programa de patios y plazas.
A vuestra disposición.
Un fuerte abrazo,
Mar.
El pasado domingo 6 de agosto tuvimos el placer de encontraros con esta maravillosa actuación, en las escaleras del Palacio de Anaya, donde comienza la obra. Estábamos por allí en ese momento, y fue un verdadero lujo seguirles por las calles de Salamanca disfrutando de literatura, risas, comedia, pasión … Rodeados de público entusiasmado, entre los que estaban mis hijos de 6 y 10 años.
Nos llevamos un grato recuerdo de Salamanca. Una tarde inolvidable.
Y además, qué ganas de ponernos con la lectura del clásico de la Celestina 🙂
Gracias y saludos,
Ana
Cuanto me alegro de vuestra experiencia, muchas gracias por compartirlo.
Espero que volváis pronto a Salamanca y que la lectura del clásico sea igual de grata que el paseo con la Celestina.
Un saludo.